Puede que te hayas mudado a una casa nueva, o que acabes de tener hijos. Sea cual sea el motivo, es posible que estés pensando en instalar cámaras de seguridad para proteger tu casa y a tu familia. Pero, habiendo tantas opciones caras, ¿merece la pena comprar una cámara de vigilancia?
En este artículo, analizaré los pros y los contras de las cámaras de vigilancia para ayudarte a tomar una decisión. Desde los costes iniciales y continuos hasta lo bien que realmente evitan la delincuencia, aquí tienes toda la información que necesitas para decidir si las cámaras merecen la pena o no.
Pros y contras de las cámaras de vigilancia
Aunque las cámaras de vigilancia pueden evitar que se cometan delitos y pueden detectar delitos en curso, las cámaras pueden costar hasta cientos de euros y ya ha habido casos de hackeo. Aquí tienes una lista completa de las ventajas e inconvenientes que debes tener en cuenta al tomar tu decisión.
Ventajas
Las cámaras de seguridad evitan la delincuencia
Incluso la mera presencia de cámaras, sobre todo cámaras exteriores fácilmente visibles, puede evitar la delincuencia. Un estudio publicado en The Economic Journal analizó el efecto de las cámaras de vigilancia instaladas en las estaciones de metro y descubrió que reducían la delincuencia en un 25 % aproximadamente. Una parte de la delincuencia se evitó, mientras que otra se desplazó a zonas próximas al centro de la ciudad.
Pueden reunir pruebas de delitos
Aunque las cámaras de seguridad no impidan la delincuencia en todas las situaciones, pueden reunir pruebas de vídeo de delitos en curso, que podrían ser útiles durante un juicio. Sobre todo en el caso de las cámaras montadas que suben vídeos a la nube, es fácil descargar esas grabaciones y enviarlas a la policía, si es necesario.
Pueden darte tranquilidad
Aparte de sus efectos tangibles en la prevención de delitos, la mera presencia de cámaras de seguridad puede darte tranquilidad, lo que podría valer el coste por sí solo.
Son cómodas
Las cámaras de seguridad son útiles de otras maneras, no solo para la delincuencia.
- Puedes utilizarlas para saludar a tu hijo cuando llega del colegio
- Dar indicaciones a un repartidor que vaya a dejar un paquete en la entrada
- Comprobar si te has dejado las luces encendidas
En otras palabras, las cámaras de seguridad te permiten controlar tu casa desde cualquier lugar del mundo, y si las cámaras tienen audio bidireccional, puedes comunicarte con quien esté dentro.
Descuento en el seguro de hogar
Dependiendo de tu compañía, podrías obtener un descuento de hasta el 5 %añadiendo un sistema de seguridad con cámaras a tu casa, aunque los requisitos variarán en función de tu compañía de seguros de hogar.
Desventajas
Gran coste inicial
Las cámaras de seguridad tienen un coste único y otro continuo. El coste de una sola cámara oscila entre los 20 y 400 €, y ten en cuenta que es posible que necesites disponer de varias cámaras interiores y exteriores, dependiendo del tamaño de tu casa.
Sin embargo, aparte del coste del equipo en sí, puede que tengas que pagar hasta 25 € al mes por supervisar tus cámaras, ya sea por ti mismo o a través de un servicio de supervisión profesional, así como por el almacenamiento en la nube de tus grabaciones de vídeo.
También es posible que tengas que pagar un permiso para tus cámaras, dependiendo de tu localidad, así como costes añadidos de electricidad, en el caso de las cámaras con cable. Además, si pagas una instalación profesional, podría costarte unos 100 euros.
La instalación manual es un engorro
Aunque decidas instalar tú mismo las cámaras, puede ser un poco complicado, sobre todo si quieres conectarlas a la electricidad de tu casa. La instalación también puede requerir costes ocultos, como cables y extensores Wi-Fi, o herramientas que aún no tengas.
Problemas de ciberseguridad
Cualquier cosa que esté conectada a Internet corre el riesgo de ser hackeada, y las cámaras de seguridad no son una excepción. Las cámaras de seguridad de Ring, por ejemplo, han sido hackeadas en repetidas ocasiones en los últimos años, como informa The New York Times. Aunque las cámaras de videovigilancia que no están conectadas a Internet no corren el riesgo de ser hackeadas, no podrás ver las grabaciones de la cámara a distancia, lo que puede anular su finalidad para muchas personas.
Factores adicionales que tener en cuenta
Otro factor que hay que tener en cuenta es que las cámaras de seguridad, por sí solas, quizá no sean suficientes para un sistema de seguridad doméstico. Las cámaras no pueden verlo todo. Obviamente, no querrás tener cámaras en dormitorios o cuartos de baño por motivos de privacidad.
Esto puede requerir que compres un sistema de seguridad más amplio con elementos como sensores de puertas y ventanas, sensores de rotura de cristales y detectores de movimiento. En otras palabras, comprar las cámaras de seguridad por sí solas quizá no sean suficientes para proteger tu casa, por lo que te recomiendo que tengas en cuenta el coste de un sistema de seguridad mayor.
Sin embargo, la mayoría de los sensores son relativamente baratos y fáciles de instalar con solo colocarlos en la pared; las cámaras son el mayor gasto de un sistema de seguridad por un amplio margen.
¿Valen la pena las cámaras de vigilancia?
En mi opinión, las cámaras de vigilancia merecen la pena si vives en una casa unifamiliar o adosada. Sin embargo, si vives en un edificio de apartamentos, probablemente no sean necesarias, sobre todo si tienes portero u otro tipo de seguridad.
Sin embargo, si tienes hijos, comprar una cámara de vigilancia puede ser una inversión que merezca la pena para proteger tu casa y darte tranquilidad. Aunque solo las uses para controlar los paquetes y evitar robos, podrían amortizarse, sobre todo si tienes objetos de valor o diriges un pequeño negocio desde casa. Las cámaras también pueden ser una buena forma de que los administradores de fincas controlen una situación sin tener que desplazarse físicamente hasta allí.
Sin embargo, si te preocupa la privacidad o el hackeo, no te recomiendo que adquieras cámaras de vigilancia. En su lugar, deberías quedarte con los sensores de seguridad, que proporcionan notificaciones de movimiento sin mostrarte lo que ocurre en tu casa.
Una buena forma de valorar si las cámaras de vigilancia te merecen la pena es comprar una sola cámara, instalarla y ver cuánto la utilizas y si te ha parecido que vale o no su precio. Muchas empresas ofrecen devoluciones gratuitas o garantías de reembolso de 30 días, y teniendo cámaras a partir de 20 €, no pierdes mucho por probar una.